Más allá de los múltiples y variados aspectos de la vida del Dr. Fernando “Nano” Inza, médico neumonólogo de la ciudad de Azul, hay dos ejes principales que son la profesión médica y la pasión por el rock and roll:
“Desde muy chico estuve ligado a la música, recuerdo esas noches de verano cuando después de cenar mi padre se ponía a tocar el piano, y yo miraba embelesado esas viejas partituras, desde donde brotaban tangos y pasodobles que me marcaron, y yo a su lado, me pedía que cantara. Mi padre y mi tío eran médicos también, mi tío pianista de música clásica y papá era más tanguero”.
En referencia a la vocación por la medicina, el Dr. Inza comentaba:
“Como yo estaba en un ambiente médico desde pequeño, iba percibiendo el trato con la gente, estar al servicio del otro, intentar acompañar y reestablecer su salud, eso era lo cotidiano que yo vivía y se fue transformando lentamente también en lo que quería hacer, se dio como algo natural, mi hermano médico, y mis hijas del mismo modo como continuidad de algo tan lindo”.
Finalizando la entrevista Nano habló de su reciente jubilación, pasando de ser durante tantos años afiliado activo a beneficiario de la CPSM:
“Fue una decisión gradual, es importante cuando uno tiene otros intereses aparte de la medicina, y no todo gira en torno a ello, porque si es así cuando uno se jubila queda vacío, ahora tengo amplitud de horarios para hacer tantas actividades que me llenan de satisfacción, quiero ver bien a mi familia y disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, junto a mis amigos, y toda mi gente querida”, “la verdadera felicidad está en las cosas más chiquitas”.
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